Como ya es tradición, la Conferencia Episcopal Chilena, a través de su Área Pastoral Social Caritas, desarrolla desde el año 1982 “Cuaresma de Fraternidad”, instancia que busca promover una vivencia profunda del tiempo litúrgico de Cuaresma e ir en ayuda de personas y grupos de nuestra sociedad que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
Con el fin de potenciar esta iniciativa y seguir motivando a las personas de buena voluntad a vivir los pilares de la Cuaresma, el Comité Permanente y la Comisión Pastoral de la Conferencia Episcopal Chilena han acordado, de manera excepcional este año, extender la campaña hasta el 4º Domingo de Pascua (17 de abril).
Este 2016 Cuaresma de Fraternidad tiene una connotación especial ya que se desarrolla en el Año de la Misericordia convocado por el Papa Francisco. En este marco, es importante recordar que Cuaresma de Fraternidad no se trata simplemente de una campaña para reunir dinero; es una invitación a encontrarse con Cristo, poniendo la mirada y el corazón junto a quienes más lo necesitan, orando y haciendo gestos de austeridad que nos permitan practicar la solidaridad con acciones concretas que nos lleven al encuentro con los demás.
Desde el año 2016 y hasta el 2018, Cuaresma de Fraternidad estará dedicada a los adultos mayores como una manera de reconocer su dignidad, el valor de su experiencia y el gran aporte que hacen al desarrollo de nuestra sociedad, atendiendo también a las vulneraciones y carencias que muchos de ellos viven.
Los aportes recaudados permitirán ir en ayuda de ellos y financiar proyectos en todo el país, orientados a mejorar sus condiciones de vida y a promover su participación, el respeto de sus derechos e instancias que contribuyan para que puedan envejecer con dignidad.