
Nuestros programas de acogida y acompañamiento brindado a quienes llegan a la Fundación Paternitas, sea en forma espontánea o enviados por las redes que trabajan con juventud en conflicto con la justicia, nos introduce, más veces de las que uno quisiera, en ese espiral de reflexión que nos conduce hasta los laberínticos recodos de una vida marcada por historias de infelicidad y rechazo desde el mismo instante de la gestación.
A muchos de los jóvenes atendidos los hemos definido como una especie de “abortos vivientes”, puesto que no son queridos por sus padres, ni los aceptaron, ni acogieron cuando fueron concebidos. Ese dolor se cuela profundo, por todos los poros de su existencia, como hielo mortal y los hace ser refractarios a muchas iniciativas y propuestas que pueden ser significativas para sus vidas.
Los esfuerzos desplegados a favor de nuestros usuarios, quedan muchas veces estériles debido la ausencia de los cimientos del amor, ya que no hubo afectividad, ni la mano cálida, ni la mirada tierna y bondadosa, menos aún la palabra oportuna y amable.
Sin ese arraigo ni construcción de esperanza el corazón no logra la solidez requerida, al contrario; las arenas movedizas de la inseguridad, víctimas de las actitudes violentas y agresivas, del frío físico y del alma, del hambre de abrazo y calor de madre, fundaron los miedos, la sospecha y la venganza.
Ante un panorama tan incierto y desprotegido, de abandono y malos tratos, de sombras y negaciones, podemos comprender sin grandes análisis el desenlace y la opción de vida de quienes atendemos. Con todo nuestra tarea es revertir estos escenarios y como tal nos abocamos con la mayor de las diligencias y profesionalismo para extender nuestras manos y en un gesto de amor y confianza invitarlos a un canto nuevo, a un puerto de aguas calmas, limpias y refrescantes. Esta es nuestra misión y el desafío más singular que nos define.
Se trata de crear dignidad, humanidad y estabilidad emocional y espiritual. Se ejecuta de mil maneras, pero sé por sobre todo con innumerables signos que dejen de manifiesto que su vida nos interesa, que es extremadamente valiosa, única, con cualidades y virtudes nobles, bellas e irrepetibles. En síntesis; ofrecemos el lenguaje del gesto y de la señalética en donde la persona se encuentre y se valore. Sin embargo, muchas veces la melancolía o aquella tristeza incubada, los hace alejarse para volver a deambular entre las soledades y fantasmas de su pasado.
A distancia, quizás en los más noche de su alma, aquellos “rumores de amor” que le susurran, creados por la Fundación sean los único capaces de hacerlos volver a casa.
0 respuestas a “Atender a los «abortos vivientes»”
Padre Vial, sus palabras calan profundo, son las precisas para despertarnos, para que la sociedad entienda que ahí donde parece haber un desierto, donde no valdría la pena invertir, se esconden a veces la mayores riquezas.
Espero que Dios lo siga iluminando en su incansable trabajo y que sean muchas las personas que al leer esto, se percaten de la urgencia que hay, en ayudar a tanto niño abandonado y desprotejido.
Cordialmente
SIC
por lo mismo debe ser efectiva la opcion del aborto en chile, o acaso queremos creer que con un par de fundaciones vamos a reemplazar lo que de verdad un niño necesita desde que es concebido, la falta de amor en la infancia y adolescencia no se supera nunca y no hay manera de revertir el dolor y la amargura de saberse un hijo o hija no querido nui deseado, eso lo se por propia experiencia, y lamentablemente al ser padres nosostros (los hijos no deseados), es muy dificil aprender a entregar afecto y amor que no tuvimos, yo personalmente hubiera deseado que me abortaran a que me dieran la vida que me dieron, para los demas es facil decir que es linda la labor pero hay que ver y entender la otra parte, el hecho de sentir que nadie te ha querido nunca te hace una persona resentida y dolida, sin ganas de vivir y con una carga emocional que los que estan a tu lado no entienden, he tenido que VIVIR, por mas de 50 años con esto y no es para nada agradable.
no hay cura, ni iglesia, ni gobierno ni fundaciones, que hayan reemplazado lo que hubiera querido tener cuando fui niña, amor…. de padres.
no hay cura, ni iglesia, ni gobierno que reemplace el afecto que debiamos haber recibido, por ello yo
Eliana, me da tristeza leer lo que ha escrito, usted debe haber sufrido mucho para desear que sus padres la hubieras abortado. Lo lamento, me duele y desde donde estoy le digo que quisiera en estos momentos abrazarla con carino y decirle que nadie sobra en esta tierra y usted puede revertir todo eso en algo positivo: de amor a otros, trate de transformar la pena en alegría, el egoísmo en generosidad, el desamor en amor.
NO concuerdo con usted en que la solución sea el aborto, creo que es la paternidad responsable, es decir, engendrar ninos deseados y no por una sexualidad irresponsable. Eso es más sano para todos, más barato, y tiene muchas menos complicaciones sicológicas, sociales, legales y físicas que un aborto.
Un abrazo desde lejos.
Padre Nicolás:
Que el Espíritu Santo siga inspirándolo. Jesús resucitó muertos, también puede dar nueva vida a todos los hombres, mujeres, adultos y jóvenes, niños también, nacidos y criados en violencia y dolor. Así sea.
Abortos vivientes no es el mejor titulo para personas con sentimientos y resentimientos ,y a la vez heridos por los recuerdos. los abandonados , los no amados desde el vientre materno tienen muchas posibilidades de rehacer su alma, El nacer de pie es ya una circunstancia para que tenga menos fuerza en vivir, pues el nino se rebela a vivir. Un no nacido cuya madre se cae de una larga escalera sufre siempre de temores,busca protegerse, la madre en su instinto de conservacion corta su union espiritual , un nino en incubadora sera timido. Asi toda la humanidad tiene algun defecto emocional.
Es tan maravilloso ayudar a estas personas y he ido haciendo camino con mujeres, explicando por que estan aqui con tantas carencias, y como dice San Pablo: mi pueblo perece por falta de conocimiento, por lo que me tomo muy en serio esas palabras y enseno lo que deben saber y no tanta sicologia ni dogmas , porque se confunden. Tengo un profundo amor por los abandonados desde el vientre. Gracias a Dios puedo darme cuenta
cuando alguien tiene este tipo de problemas, porque no solo estan entre los pobres sino tambien en clases mas altas.Los que sufren no necesitan tantas explicaciones, necesitan que se les escuche y luego que ellos escuchen, esto se hace desde el corazon.
Siempre sirviendo a Jesus orando por ellos y a veces con ellos se pueden recoger muchos frutos, que Dios les abrace
Felicitaciones Padre Nicolás
Me parece una labor extremadamente hermosa y difícil. Me pregunto porque un Ser debe cargar con la culpa de otros Seres ya que un bebé no pide venir a este mundo. Ojalá pudieran otrorgarle esa paz que necesitan esas personas, debe ser muy doloroso… Un día vi una noticia (una de las tantas malas noticias) donde unos adolecentes robaron un auto y en la carrera por arrancar mataron a una profesora que iba en su auto, chocando con ella y me llamó tanto la atención los hijos de esta mujer, que dijeron «no es culpa de esos muchachos, sino de los padres, de la Sociedad». Que personas tan llenas de amor y de verdad, ya que detrás de estos chiquillos hay un abandono tremendo.
Lamentablemente la vida es así y seguirá así, pero siempre habrá tambien personas buenas… que estarán nadando contra la corriente.
Por eso es super importante la educación y la entrega de medios preventivos para evitar estas situaciones, que a la larga trae tristeza y mas miseria…nos falta tanto como sociedad para ser mas justos, mas solidarios y mucho mas responsables.
fuerza padre su labor es muy linda e inspiradora y gracias en nombre de todos esos «abortos vivientes «
Querida Eliana, sabes que hay alguien que siempre te a querido estuvo siempre en los momentos mas tristes de tu vida, nunca estuviste sola, ademas si estas enviando este mensaje es porque estas viva y si estas al momento de nacer hubo un amor tan profundo entre tus padres y tu que muchos no lo entienden inclusive tu hoy, solamente que te salgas de ti y mires tu entorno y veas cuanto dolor hay mas del que tienes en tu vida el dolor nos hace fuerte y a pesar de ese dolor se puede amar, dar vida y esperanza a otros, tu encontraras la felicidad cuando veas en tu dolor la fortaleza inmensa que viene de Dios para sanar a pesar de lo que has vivido en estos 50 años. No pierdas mas tiempo se fuerte y encuetra en tu dolor la felicidad solo el que lo vive lo entiende, te quiero mucho.
Un abrazo fraterno tu hermano.